Cómo reconquistar el tiempo que el móvil te quitó
20 ideas para meter en vereda a tu smartphone
Si ahora mismo miras cuántas horas al día estás utilizando el móvil puede que te lleves las manos a la cabeza.
Te espero, haz la prueba ahora mismo y responde esta sencilla encuesta:
Y es que el teléfono móvil nos ha convertido en sus pequeños esclavos con notificaciones y avisos a tutiplén. No me refiero únicamente a las redes sociales, ocurre con todo tipo de aplicaciones, incluso las nativas.
Admitámoslo, consumir tiempo de pantalla alimenta nuestra ansia de satisfacción inmediata y además, porqué no decirlo, el teléfono puede ser muy útil.
¿Cómo si no haríamos para encontrar la mejor ruta para llegar a casa, el restaurante al que ir a cenar o el número de teléfono de un pariente?
Pero de ahí a que le dediquemos 2, 3, 4 o más horas al día, va un mundo.
Cuando esto lo llevamos al entorno profesional, se convierte en un pequeño drama. Porque resulta que, mientras nuestra productividad va al límite, estamos dedicando una cantidad de tiempo totalmente exagerada al móvil .
Ya hablé del robo más escandaloso de los últimos 10 años hace unas semanas: nuestra atención y cómo nos la han destrozado.
De manera que aquí van 20 ideas, que se dice pronto, para que pongas a este pequeño enfant terrible en su sitio, que ya está bien.
Las he clasificado de tres tipos, según con lo que estén relacionadas:
20 ideas para meter tu móvil en vereda:
📲 Tecnología
🧘♀️ Hábitos
🧨 Drásticas
📲Tecnología
Nuestros teléfonos son auténticas maravillas mucho más potentes y sofisticadas que los ordenadores que teníamos tan solo hace unos años. Tenemos la responsabilidad de sacarles todo el jugo, porque hay mucha tela que cortar.
Aquí van algunas de las medidas que puedes tomar hoy mismo:
1 Modos de concentración
Una de las primeras medidas que puedes implementar para reducir el tiempo que dedicas al móvil es activar los modos de concentración en horarios estratégicos. Estos modos permiten bloquear notificaciones de aplicaciones, mensajes y llamadas, permitiéndote trabajar o desconectar sin interrupciones innecesarias.
Puedes configurarlos de forma automática durante ciertas franjas del día o activarlos manualmente cuando necesites enfocarte.
Yo, por ejemplo, tengo el modo “Trabajo” activado de 7 a 17. Y en su configuración tengo qué aplicaciones se lo pueden saltar, o qué llamadas de qué personas pueden saltarse ese modo. Obviamente cambiar de modo por el motivo que sea es más sencillo que el mecanismo de un chupete.
2 Desactiva las notificaciones push
Otra idea es desactivar las notificaciones push de las redes sociales y correos electrónicos que no sean urgentes. Muchas veces, la constante llegada de avisos sobre interacciones en redes o mensajes no prioritarios genera una sensación de urgencia que realmente no existe.
¿Necesitas saber urgentemente que Fulanito te ha enviado un mensaje en Linkedin, o que le dió like a una de tus publicaciones? Ya te digo que para la mayoría de mortales, simplememente no.
Puedes gestionar todo eso en momentos concretos, no cuando suceden. Si es necesario, puedes establecer horarios específicos para revisar las redes o tu bandeja de entrada, en lugar de hacerlo continuamente.
3 Aplicaciones de control de uso
Ojo con las redes sociales, están diseñadas para que te enganches a ellas. Ese scroll infinito de contenidos es una trampa.
Utilizar aplicaciones que limiten el tiempo que pasas en redes sociales también es una opción muy útil. Muchas plataformas ya incluyen opciones para establecer recordatorios cuando has pasado demasiado tiempo en la aplicación, y si se trata de algo que haces por hábito, este tipo de herramientas puede ayudarte a crear una barrera de conciencia.
Yo conozco one sec, pero estoy seguro de que hay un montón más. Básicamente lo que hace es darte una pausa cada vez que, por ejemplo, abres tu instagram. Si te pasa que eres de los que va a las redes de forma repetitiva buscando la dopamina, este tipo de aplicaciones son para ti. Te ayudan a darte cuenta de que te estás comportando como un yonki digital.
4 Respuestas automáticas
También puedes configurar respuestas automáticas para correos o mensajes, señalando que no estarás disponible de inmediato pero que atenderás las solicitudes a partir de determinada hora. Esto reduce la presión de tener que responder de inmediato y da una imagen profesional de gestión del tiempo.
Si lo tuyo no es la tecnología igual se te hace un mundo ahora mismo, pero créeme. No es nada difícil configurar una respuesta automática de correo electrónico y te puede dar la vida. Busca en Google cómo hacerlo según el programa de correo que utilices.
Aquí para Gmail, Mail o Outlook.
5 Pégale un meneo a la pantalla de inicio
Otro enfoque es reorganizar la pantalla de inicio del teléfono, dejando solo las aplicaciones esenciales y moviendo aquellas que más distraen, como redes sociales o juegos, a carpetas menos visibles. De esta manera, reduces la tentación de abrirlas de manera impulsiva.
Si lo piensas, seguro que de forma recurrente utilizas muy pocas aplicaciones que sean esenciales para tu trabajo.
6 Configura límites diarios
Configurar límites de tiempo en cada aplicación es una función disponible en la mayoría de smartphones actuales. Puedes definir un tiempo máximo de uso diario para aplicaciones como las redes sociales, que se bloquean una vez alcanzado el límite.
Esta estrategia fomenta una mejor autogestión ya que, cuando llega el límite auto impuesto, te sientes como ese niño que come demasiado chocolate.
🧘♀️Hábitos
Que sí, que los móviles son malos malísimos. Pero hay muchos cambios que puedes hacer en ti para que no tengas tantísima dependencia. No todo es culpa de los demás, eeehhhhhh.
7 Haz listas, leches
Muchas de las personas que tienen peor relación con su móvil, también lo tienen con las tareas. Una organización del trabajo y las tareas también influye en el uso del móvil. Si no tienes una organización clara acerca de lo que debes hacer es más fácil que te lances a buscar tu dosis de pantalla.
Si, en cambio, tienes un foco claro acerca de lo que debes hacer será un poco más difícil que se distraiga.
8 Aprovecha las reuniones para cortar
Algo que a mí me funciona muy bien es agrupar las tareas por sus características, no por sus ámbitos de responsabilidad. O sea, puede que tenga una reunión con un cliente y a continuación otra de ámbito personal. Pero las dos son reuniones y sé por experiencia que mi cerebro funciona mejor así.
Y otra cosa que aprendí ya hace mucho tiempo es que ese tipo de bloqueos me ayuda mucho a dejar de lado el móvil. En esos tiempos no me preocupo por notificaciones ni nada por el estilo. Es más fácil trabajar con una mentalidad de “cero interrupciones” cuando las reuniones, por poner un ejemplo, no están repartidas durante todo el día.
Nota: no seas de esos que mira los mensajes de tapadillo mientras está en una reunión, es de mala educación.
9 Programa los momentos de conexión
Una de las soluciones más efectivas es establecer momentos específicos para revisar el móvil, y no darte la satisfacción de hacerlo hasta que llegue el momento.
En lugar de consultar tu dispositivo cada vez que suena o vibra, puedes decidir que solo lo revisarás a ciertas horas, por ejemplo, al inicio, al mediodía y al final de tu jornada. Esto te permitirá ganar foco y además de dará la satisfacción de que eres tú quién tiene el control
10 Deja el móvil fuera
Esto lo aprendí de un cliente cuando, antes de reunirnos, me propuso dejar los móviles fuera de la sala. De primeras me chocó, pero enseguida comprendí su preocupación por el tema. Si el dispositivo no está al alcance de la mano, es menos probable que sientas la necesidad de revisarlo con frecuencia.
Una alternativa menos radical es poner el móvil en modo avión mientras estás con otra persona o concentrado en una tarea determinada.
Tal vez no puedas hacerlo por toda la jornada, pero seguro que sí durante franjas de tiempo que te permitan un nivel de concentración alto.
11 Detox digital
Una alternativa que tal vez te puedas plantear es hacer un "detox digital" de vez en cuando, desconectando completamente durante fines de semana o al menos en las tardes.
Esto permite reequilibrar tu relación con el móvil y las redes, ayudándote a recargar energías sin la sobrecarga de información constante. Puede que te parezca misión imposible ahora mismo, pero algo así puede ayudarte a darle la vuelta a la situación.
12 Crea rutinas de desconexión
Establecer rutinas de desconexión es igualmente crucial. Intenta evitar el uso del móvil durante la primera hora después de despertarte y la última antes de dormir. Este tiempo libre de pantallas ayuda a comenzar y finalizar el día de manera más relajada, sin el bombardeo de información que genera estrés.
Si eres de los que se levanta y ya por el pasillo busca mensajes pendientes, debes ponerle remedio. Y hacerlo antes de irte a dormir solo activa tu cerebro para fastidiarte el descanso, tú mismo.
🧨 Drásticas
Si las anteriores no son suficientes, siempre puedes ponerte radical y meterle caña de verdad.
Aquí van medidas de choque por si quieres sacar toda la artillería:
13 Envíalo al carajo
Una opción solo para valientes es pasarte a usar un "dumbphone" o un teléfono básico para ciertas ocasiones. O sea, a un móvil de los de antes. Algo que permita llamar, enviar mensajes pero sin juegos, redes sociales ni otra fauna variada.
Pero si eso te parece demasiado bestia, siempre puedes utilizar apps como DumbPhone, que convierte tu súper teléfono en algo mucho más minimalista.
14 Recupera tu reloj
Se sabe que uno de los motivos habituales para mirar la pantalla, y con ella sus notificaciones, es ver la hora.
Algo tan sencillo como usar un reloj tradicional en lugar de mirar el móvil puede evitar que te distraigas accidentalmente con notificaciones u otras aplicaciones. Ojo, lo que no vale es meterte en la pulsera un teléfono con pantalla llena de notificaciones, que entonces estamos en las mismas. Estamos hablando de un reloj como el de tu abuela.
15 Pásate al papel
Yo me veo incapaz de aplicarla, pero debo admitir que conozco gente que se desenvuelve razonablemente bien teniéndolo todo (o casi) en papel.
Una medida interesante es implementar el uso de un organizador físico, como un cuaderno o agenda en papel. Al anotar tareas y pendientes de manera manual, reduces la necesidad de utilizar el móvil para consultar listas de tareas o calendarios, lo cual a menudo deriva en distracciones adicionales.
Como te digo, creo que no es para mí, pero oye, quién sabe.
16 No eres imprescindible
Búscate la vida para delegar o automatizar. Si crees que tu empresa se va a parar si tú no estás, deja que te diga que estás en un error y grave. Puede que sea así de forma puntual, pero no sostenida en el tiempo.
Es importante también aprender a delegar tareas. Muchas veces, el uso excesivo del móvil proviene de la necesidad de gestionar múltiples responsabilidades a la vez. Delegar tareas a compañeros de equipo o automatizar procesos repetitivos te permitirá liberar tiempo y reducir el uso del dispositivo.
17 Elimina aplicaciones
Una práctica efectiva, y cada vez más frecuente, consiste en simplemente eliminar todo lo que distrae.
Fuera instagram, fuera linkedin, fuera tiktok, fuera todo lo social. Si tienes un problema con eso, ya verás qué diferencia. Te aparecerá de golpe tiempo para hacer deporte, para leer o para lo que sea.
18 Crea zonas libres de teléfonos
Si miras las horas de consumo verás que muchas de ellas son en tu tiempo libre. Puedes ser también radical con lo que haces en tu tiempo en relación al teléfono.
Crea zonas libres de tecnología, como por ejemplo no usar el móvil en el comedor o en el dormitorio. Esto crea un entorno de desconexión en ciertos momentos del día, permitiéndote relajarte y reducir la dependencia del dispositivo. Si no lo tienes a mano, simplemente no lo utilizarás.
19 Ten dos móviles
Sencillo, uno para el trabajo y otro para lo personal. Sí, es incómodo, ya lo sé. Más lo es medicarte para el estrés, perder el pelo o la pareja.
Puedes instalar dos líneas en el mismo móvil, pero puede que acabes en las mismas si la disciplina no es tu fuerte.
20 Olvídate el móvil
Aunque sea de vez en cuando, date el gusto de dejarte el móvil en casa. Pruébalo, tienes poco que perder. Mañana, como quién no quiere la cosa, te olvidas el móvil.
Seguro que tendrás un día mucho más tranquilo y, quién sabe, igual te sorprende lo separados que podéis estar.
🔦 Esto es interesante
Hablando de minimalismo digital, creo que una de las primeras ideas que me llamó la atención de Notion fue la apariencia. Como de UX sé menos que una patata no puedo darte los motivos concretos, pero me transmitió mucha tranquilidad desde el principio.
Es cierto que Notion es una navajita suiza de organización y a la vez eso me parece un inconveniente que mete fricción. Puede hacer tantas cosas distintas que no es fácil pillarle el punto.
Pronto descubrí a Easlo y su Second Brain cargado de minimalismo. Pero creo que de quién aprendí más, especialmente al principio, fue de Elena Madrigal. Si esto de Notion como organizador de tu cerebro digital se te está atragantando echa un vistazo a su Notion Starter Pack, que está genial.
📕Leer es de guap@s
Buscar nuevos caminos, explorar la creatividad buscando nuevas ideas requiere de metodologías específicas. Es muy difícil que las buenas ideas, los enfoques originales surjan mirándonos las caras, con una libreta en blanco en una sala que parece un hospital.
Por eso libros como Game storming son una bendición.
Contiene 83 juegos para facilitar la generación de ideas, el gran mirlo blanco. Los juegos están clasificados según la etapa en la que los puedes utilizar. Además cada uno está explicado en una ficha con los objetivos, número de jugadores, duración e instrucciones detalladas. O sea, cualquiera se puede poner manos a la obra.
Está todo mal, pero tiene remedio.
Cuídate,
Agustí López
Yo tengo una limitación configurada en Twitter por ejemplo.
Creo que es necesario distinguir el tiempo que pasamos tonteando con el móvil a cuando lo estamos usando de forma productiva o para trabajar.
No se trata de dejar de usar el móvil, sino de no usarlo para chorradas. El móvil per se no creo que sea el problema.
Si estoy unas horas con el aparato, que luego me van a ahorrar un montón de tiempo, por ejemplo si lo comparo con lo que tardo con papel y boli, benditas las horas con el aparato.
Me ha encantado la parte de acciones drásticas. En mi caso estoy empezando a practicar algún día que salgo de casa (ej: salgo a cenar con mi pareja) lo de "olvídate el móvil". Cuesta un poco hacerlo, pero ya le estoy cogiendo el truquillo.
Por cierto, también uso one sec app y me es muy útil una vez a la semana (lunes a primera hora) apuntar cuantas veces he desbloqueado el teléfono la semana anterior e ir registrando y viendo la tendencia (llevo 3 años haciendo eso todos los lunes) y poco a poco lo voy bajando (aun así sigue altísimo)