En un mundo digital, ¿dónde quedó lo humano?
Y de paso te cuento cómo van las cosas por aquí
¿Cuándo fue la última vez que miraste a alguien a los ojos durante una reunión, sin una pantalla de por medio?
Estoy bastante seguro de que tu día a día también se ha convertido en algo bastante digital, a ver si acierto:
Vídeo llamadas, unas cuantas cada semana.
Horas delante del CRM, del ERP o de cualquier otro programa de gestión.
Te llegan decenas de mensajes por correo electrónico, por whatsapp o por paloma mensajera (tú ya me entiendes).
Preparas documentos delante de la pantallita.
¿Me dejo algo? Seguro que sí, pero creo que nos vamos haciendo una idea de cómo es nuestra vida profesional hoy.
Esto no es nada nuevo, aunque la pandemia lo aceleró todo. Yo no sé tú, pero yo antes hacía un montón de kilómetros al año para reunirme (y trabajar) con todo tipo de equipos y personas.
Ahora gasto más Teams y Zoom que gasolina y autopista, es un hecho. Y a lo mejor a ti te pasa lo mismo.
No es que me parezca mal, no me malinterpretes. Es todo mucho más eficiente, dónde va a parar.
Peeeeeero, y aquí viene el pero, con tanta cosa digital hemos perdido interacción humana. Y no digo que haya que ir para atrás, al contrario. Creo que soy poco sospechoso de ir en contra del cambio y menos si es digital.
Lo que pasa es que me da la sensación que nos hemos pasado un poco de frenada, ¿no te parece?
Cuando estamos cara a cara se produce una comunicación distinta a si hay un pantalla enmedio. Todos nuestros sentidos se ponen en marcha, el lenguaje corporal tiene más importancia y cuidamos más la relación. Elementos que nuestro cerebro conoce perfectamente y que para los que además está especialmente diseñado para procesar.
Así que mi mensaje de hoy es el siguiente:
En un mundo digital, sé social.
Lo que quiero decir es que creo que es mejor equilibrar un poco la balanza. Está genial ser eficientes con las reuniones, utilizar las herramientas a nuestro favor y demás. Solo faltaría.
Pero a la vez yo propongo cuidar un poco más lo presencial, el contacto directo.
Ahora que se acerca el final de año y más de uno se pondrá modorro, aquí van algunas ideas para recuperar algo de nuestro animal social:
1. La paradoja del café
Un café para salvar tu proyecto
Las reuniones presenciales de entrada son menos eficientes que si se hacen en remoto. Ya sabemos que te ahorras desplazamientos y que todo el mundo va más al grano, como queriendo acabar más rápido.
Pero ojo. ¿Cuántas veces una conversación con un café salvó un proyecto que parecía condenado?
Esa chispa de conexión humana no se genera en un chat grupal, por muy rápido que escribas.
P.D: si el café no es lo tuyo, busca alternativas. ¿Quedar a comer? ¿Simplemente quedar físicamente?
2. Recupera las microinteracciones
El poder de lo pequeño: microinteracciones que marcan
Fomenta la interacción en lo pequeño, en el detalle del día a día.
Creo que hay un proverbio chino que dice algo así: "El hombre cuya cara no sonríe no debe abrir una tienda".
¿Cuánto hace que no te interesas por los hijos de tus compañeros?
¿Cuánto hace que no saludas con ganas al pasar por delante de los de siempre?
¿Cuánto hace que no llamas a un cliente solo para saber cómo le va, sin segundas intenciones?
En un mundo tan utilitario como el nuestro, la relación personal es algo diferencial.
P.D: el proverbio creo que lo menciona Dale Carnegie en su libro 'Cómo ganar amigos e influir sobre las personas'. Si no es así, que me perdone el Dios de los proverbios.
3. La ciencia del contacto humano
Tu cerebro lo sabe: el contacto humano importa
Es fascinante todo lo que el neuromarketing está averiguando en los últimos años.
Por ejemplo, ahora sabemos que un buen apretón de manos libera oxitocina. Eso quiere decir, que si el apretón ha sido firme, decidido, nuestro cerebro es más proclive a clasificar al sujeto como “digno de confianza”.
A su vez, en el centro de recompensa del cerebro se segrega dopamina, una sustancia que se encarga de acelerar el proceso la próxima vez.
En cambio, un apretón algo flojeras provoca menos segregación de oxitocina.
Más.
Un estudio de la universidad de Georgia reveló que las interacciones presenciales elevan más el estado de ánimo que el uso de dispositivos móviles o redes sociales.
Y otro de Yale (¿será por estudios?) indica que la comunicación en persona activa más áreas del cerebro relacionadas con la interacción social que las conversaciones virtuales.
También te digo que es algo que todos intuimos, ¿no te parece?
4. Hable con ellos
Desayunos, comidas y otras excusas para conectar
En las empresas hay mucho por hacer en esto de fomentar las relaciones humanos organizando encuentros presenciales más informales.
Por ejemplo, un desayuno de equipo al mes o una comida compartida pueden hacer más por la moral y el entendimiento mutuo que cualquier herramienta de gestión.
Esas conversaciones que surgen espontáneamente mientras alguien pide otro café son oro puro para la colaboración y la creatividad.
Algunas empresas grandes que conozco dan la oportunidad de charlar con la alta dirección en entorno distendido.
Lo que sea, creatividad al poder. Pero hablar cara a cara es un bálsamo de las relaciones.
5. Hablar es un comienzo, conectar es el objetivo
Hablar no es suficiente: conecta
En el mundo de empresa no basta con transmitir información; lo importante es generar conexión.
La próxima vez que tengas que presentar un proyecto importante, en lugar de enviar un mail kilométrico o un PowerPoint frío, preséntalo en persona, si puedes.
Cuando los demás ven tu entusiasmo y tu lenguaje corporal, tus ideas tienen más impacto.
Recuerda, estamos mejor preparados para conectar con las historias que con montañas de datos. Queremos sentir que nos escuchan y nos comprenden, todos nosotros.
En resumen, no se trata de dejar de lado lo digital, sino de darle espacio a lo humano.
Al final, no se trata de hacer más, sino de hacerlo mejor. Porque detrás de cada herramienta digital hay una persona que, como tú, necesita conectar. Dale un espacio a lo humano esta semana.
Prueba esta semana con algo sencillo: una llamada, un café o una conversación espontánea. Y luego, cuéntame cómo te fue. Si es con un café, todavía mejor.
😉
👁️ Te cuento cómo van las cosas
Aviso: esta parte es café para muy cafeteros.
Si te trae al pairo que te cuente mis cosillas vete al final que hoy vengo con un libro molón.
¿Sigues aquí?
Bueno, la cosa es que hacía ahora unas semanas que no te ponía al día sobre cómo va esto de “Está todo mal” y…ha llegado el momento.
Básicamente porque hace unos días que hemos superado por aquí la barrera de los 500 suscriptores y oye, ya sé que es una vanity metric, pero qué narices.
Por ponerte en contexto, en la edición número 19 te contaba que habíamos llegado a 300 seguidores…y hoy es la número 27.
19 para 300.
8 para 200.
Crece el ritmo, las cosas parece que van bien y me acaban dando la razón acerca de la decisión de empezar con una newsletter.
Suscriptores
Como te digo, hemos pasado de 500 suscriptores hace poco. Pero es que el crecimiento, queridísimos y pacientes lectores, se ha acelerado.
GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS, sé que las bandejas de entrada están peor que un Primark en rebajas, ¡¡se os quiere!!

A lo nuestro…
Mirando la gráfica parece que en noviembre llegó Mariah Carey anunciando lo innombrable:
¿Los motivos?
Pues la verdad, no tengo ni idea. Sé porque me avisa la herramienta que a partir de ese día se aceleraron las recomendaciones vía Substack. Pero eran creadores que ya me recomendaban de antes, así que no sé exactamente qué pasó.
Fíjate en esta gráfica, representa la distribución de las suscripciones según su origen.
Todo lo naranja tiene que ver con Substack…La App, las recomendaciones de otras newsletters, etc. Tan bestia como un 89% del total.
La pregunta llegados a este punto es, ¿hasta cuándo durará la fiesta?
Como te decía, a partir de cierto punto el ritmo aumentó y ahora se está acercando a 200 nuevas suscripciones al mes.
Si esto lo lee alguien con miles de suscriptores se desorinará de la risa, ya lo entiendo.
Pero es que más que se ha duplicado en el último mes, al loro.
Poco más que decir sobre este punto. Solo que me sigue sorprendiendo el efecto red en Substack, que va mucho más allá de las recomendaciones.
Esto que ves a continuación son seguidores, que incluye a los suscriptores. La diferencia está en esas cuentas que te siguen vía la plataforma PERO no reciben tus correos electrónicos.
¿Hay algo de caja de resonancia? Claro, por Substack hay mucho creador que sigue lo que hacen otros creadores. Pero tampoco lo explica todo, tal y como yo lo veo.
Aperturas
Cuando vi que las cosas se aceleraban lo primero que pensé es en la tasa de apertura. Quiero decir, muchos nuevos suscriptores lo son porque la plataforma lo pone a tiro de click…no porque me conozcan de nada.
Pero bueno, ni tan mal.
De hecho, la semana pasada subió al 50%. Así que prietas las filas, a ver cómo sigue.
Visualizaciones
La primera publicación que hice lleva 172 visitas y ahora pasan fácilmente de 500 visitas.
Teniendo en cuenta cómo funciona Substack y el crecimiento de suscriptores me parece todo bastante lógico.
En el último mes van unas 2.500 acumuladas, lo que cuadra con mi frecuencia de envío.
Todo en orden, como diría Isra Bravo.
Lo más leído
La entrada más leída ha cambiado, y ahora es la más reciente.
Después del rollo que te he pegado sobre el crecimiento, es lo más lógico.
Más suscriptores, más envíos por email, más lectores.
Aquí la recuperas: Cómo conseguir ideas brillantes sin sufrir reuniones inútiles
Ya va por 590 visitas, en las puertas del redondeo.
Substack
Como te decía, me sigue sorprendiendo el diseño de red que tiene esta plataforma.
Todos nos preguntamos qué va a pasar en el futuro. ¿Será una red social más, llena de contenido absurdo, vídeos verticales y formatos que cambian cada 5 minutos?
No tengo respuesta, solo esperanza.
Solo sé que, para Substack, encontrar el equilibrio entre la necesidad y la virtud no será sencillo.
Si el tema más o menos te interesa, solo tienes que fijarte en el auge de Notes dentro de la plataforma.
Veremos…
Colaboraciones
Sin novedad desde la última vez que hablamos, pero es algo que voy a trabajar más y mejor en 2025.
Ya estoy en conversaciones con otros creadores para buscar la mejor forma de trabajar este punto.
Patrocinios
Estoy empezando a documentarme sobre este tema, porque la verdad tengo algunas dudas antes de dar el paso.
Creo que es algo claramente a explorar, pero no acabo de ver clara la vía.
¿Qué formato es el más adecuado?
¿Tendré suficiente interés para las marcas?
Los precios que hay en el mercado, ¿compensan?
¿Qué estrategia de precio y producto me conviene más?
Estas y otras dudas existenciales pronto en sus mejores pantallas.
📕Leer es de guap@s
Si en tu empresa lo de la innovación es algo que os hace más o menos tilín, debes leer este libro.
"El dilema de los innovadores" de Clayton M. Christensen es una bofetada de realidad para cualquier empresa que crea tenerlo todo bajo control.
Christensen desmonta cómo las grandes compañías, pese a hacerlo "todo bien", pueden caer víctimas de tecnologías disruptivas que nacen en la periferia del mercado.
La idea es clara: no se trata sólo de innovar, sino de entender cuándo y cómo apostar por lo nuevo, incluso si va en contra de lo que parece lógico. Una lectura imprescindible si quieres evitar la trampa del éxito pasado.
Está todo mal, pero tiene remedio.
Cuídate,
Agustí López
Muy bueno números!!!! 👌 y lo que planteas de la conexión creo que es necesaria esa humanización, encontrarse con las personas, interactuar, la experiencia personal siempre nos hace crecer e impulsar un negocio.
Aunque nos hayamos pasado de frenada con esto de lo digital, la verdad es que yo lo agradezco tanto...
Me acuerdo cuando trabajaba en EY y me pasaba literalmente todas las semanas viajando a Barcelona para trabajar con clientes de allí (que si Caixabank, que si Volkswagen...)
A tope con Substack. Tengo la intuición que a esto de Substack le queda mucho que decir y que estamos viendo los inicios (y nosotros estamos en primera fila).
Enhorabuena por tu crecimiento Agustí
Esperemos que no venga un gigante tecnológico, la compré y lo destruya...
PD: la foto de la bandeja de entrada es lo más 🤣